Espectadores del cambio de paradigma de la TV

La televisión es el medio más líquido en el ámbito de la comunicación. Parece atrevido empezar con esta afirmación pero su reinado sobre el ecosistema de medios es en parte gracias a su adaptabilidad al ámbito digital, su carácter multiplataforma y su búsqueda de modelos de negocio nuevos. Llegamos a esta reflexión a través de un reciente informe: ‘La Televisión que viene’, de Julio y Pepe Cerezo. Lo que queda plasmado en julio de 2017, lo dibujamos, en algunos casos en las Tendencias de la Comunicación 2017 a principios de año. 

En realidad, los hermanos Cerezo hacen un análisis sobre el sector audiovisual en general. Según el estudio “Previsiones de Consumo en los Medios” elaborado por Zenit, Internet ha cambiado la forma en la que creamos, distribuimos, consumimos y monetizamos los contenidos audiovisuales. La tecnología móvil ha transformado los hábitos de consumo de los medios de comunicación y aunque la televisión sigue siendo el medio más consumido en el mundo con un promedio diario por persona de casi 3 horas (170 minutos), Internet le está alcanzando con un consumo medio de 140 minutos al día.

El estudio señala que el consumo de Internet móvil aumentó a un ritmo medio del 44% anual entre el 2010 y 2016 gracias al crecimiento del uso de los dispositivos móviles y la globalización en el acceso por banda ancha. De tener que esperar a llegar a casa y encender la tele o el ordenador, pasamos a poder ver un programa, una serie, una película o el videoclip desde cualquier lugar a cualquier hora con un smartphone o tableta. Además, la disponibilidad de contenidos adaptados y personalizados, ha hecho que miremos lo que nos apetece cuando nos apetece sin sentirnos obligados a ver la programación que nos marca la televisión tradicional.

Así pues, en 2019 el uso de Internet móvil representará un 26% del consumo mundial de medios frente a un 19% en 2016. Pasaremos de consumir 10 minutos al día de Internet móvil (datos del 2010) accediendo a los contenidos a través de aplicaciones y navegadores 122 minutos diarios en 2019. América del Norte y Asia-Pacífico son los continentes que han adoptado más rápido el uso del Internet móvil con un uso del 76% y un 75% respectivamente.

Grandes oportunidades

A pesar del aumento del uso del móvil como dispositivo de visualización de contenidos audiovisuales, el televisor seguirá siendo el anfitrión. Comparable Metrics Reports, estudio de Nielsen, apunta que en el último trimestre del 2016, el 92% del consumo total de vídeo en Estados Unidos se realizó desde un televisor y el 8 % restante se dividió entre ordenadores, smartphones y tabletas.

Pero las cifras varían según miremos un público u otro. La TV llega a un 89% de los adultos estadounidenses semanalmente, y un 79% si nos fijamos en los millenials (entre 18 a 34 años de edad). Los dispositivos conectados a la TV amplían su “share” en este segmento: alcanzando un 44% de todos los adultos y un 54% de la franja de edad 18-34 años.

La televisión inteligente

La fusión de Internet y televisión y el traspaso de contenidos del móvil a esta han ampliado y variado el uso de la pantalla aumentando el número de empresas que producen y ofrecen contenidos audiovisuales sin más requerimiento que una simple subscripción y acceso a banda ancha.

La oferta va in crescendo e in crescendo Netflix, Hulu, Google, Apple, Youtube se han sumado al formato ofreciendo programas, emisiones en directo, acontecimientos, cine, series, show de entretenimiento, información, etc en exclusiva para estas nuevas plataformas dejando a los distribuidores de televisión de pago y satélite norteamericanas con 6,55 millones de clientes menos en 2017 estimando una caída del 3,3% a finales del de año y de un 4% en 2018.

Esta situación de las plataformas de cable de pago se debe en parte a un mal servicio al cliente y a los altos precios de las suscripciones que cuestan un promedio de 123 dólares al mes por un paquete de televisión por cable con 189 canales de los cuales los usuarios solo ven alrededor de 17 de forma habitual. Así pues, la llegada de las nuevas propuestas denominadas Over The Top (OTT) hace que los consumidores abandonen dichos servicios sustituyéndolos por estas nuevas ofertas de streaming más baratas, fragmentadas y personalizables.

[+] Tendencias Televisivas: cuando el relato vale más que el formato

Servicios Over the Top (OTT)

A medida que el tradicional ecosistema de la televisión de pago se desintegra, algunos gigantes tecnológicos como Google con Youtube, Netflix, Apple, Facebook o Amazon están negociando la compra de derechos para emitir competiciones deportivas en directo o replanteándose la experiencia de ver TV en torno a aplicaciones en lugar de canales, apoderándose de los suscriptores de la televisión por cable.

En consecuencia, la publicidad también está migrando de la televisión a los medios digitales superando los 205.000 millones de euros en 2017, con un crecimiento del 36,9% frente al año anterior. Con este volumen, la inversión digital superará por primera vez al gasto en Televisión tradicional, que se quedará en los 192.000 millones de dólares este año, según los datos de Zenith.

Y como ya contamos en el informe anual de elaborado por Mary Meeker el gasto en publicidad televisiva a nivel mundial aumentó menos de 50.000 dólares des de 2010 hasta el año pasado. Mientras que internet se disparó más de 110.000 millones de dólares en el mismo periodo.

[+] Las tendencias 2017 de Mary Meeker

El vídeo es el rey de la nueva era digital

El contenido audiovisual, el vídeo, se sigue consolidando como el rey en esta nueva era digital adquiriendo el 73% del tráfico total de internet porcentaje que podría alcanzar el 82% en 2021 según previsiones del fabricante tecnológico Cisco. Y no porque la gente vea más contenido de video online sino porque ven vídeos de mayor calidad como series, películas y eventos en directo.

Redes sociales y live streaming

Netflix, Hulu, Facebook, Amazon, Twiiter, You tube, Comcast y Viacom, HBO, Sling tv, Discovery Channel, Snapchat son algunas de las OTT’s que han comprobado que la forma de diferenciarse y conseguir que los modelos de suscripción sean rentables solo se consigue mediante la inversión de contenidos propios, la agregación o mediante la compra de derechos deportivos. Así pues, Netflix prevé invertir 7.000 millones de dólares en 2017 produciendo contenidos propios aumentando su cartera de contenidos de las 600 horas en 2016 a 1000 horas en 2017.

Y gigantes como Amazon o Facebook no se quieren quedar atrás. Amazon tiene previsto invertir este 2017 4.500 millones de dólares en contenidos propios y Facebook también estaría preparando el desembarco en el mundo de la televisión con dos tipologías de programas: unos cortos y de bajo presupuesto y otros largos y de gran presupuesto con la intención de atraer la atención de las audiencias más jóvenes.

La realidad es que en la ecuación entre contenidos audiovisuales y redes sociales, hay que incluir el formato del directo. El live streaming, principalmente a través de aplicaciones móviles y en plataformas sociales, están desarrollando lo que en el informe se cita como “la televisión que viene” pero que en realidad debería ser “la televisión que consumimos”.