Marcas e influencers se necesitan unos a otros en un nuevo paradigma en el que el contenido queda supeditado a la figura del prescriptor.
El marketing de influencers lleva años en el punto de mira, aunque sigue sin estar del todo afincado en el sector. Pero en un panorama en el que solo el 5% del contenido de las marcas es interesante para los consumidores, los prescriptores son los que ganan fuerza. De esta revolución marketiniana se ha hablado en la sesión Zoom Marques organizada por el Clúster Audiovisual de Catalunya, Zoopa, Dircom Catalunya y Foment del Treball.
Solo el 5% del contenido de las marcas es interesante para los consumidores
El evento ha contado con varios invitados de nivel como los influencers Santi Millán, Ona Carbonell, Luc Lorén, Daniel Illescas y Roc Massaguer y los profesionales Daniel Pérez Barriga y Carlos Ortet. Se han destacado dos valores que no deben faltar en toda estrategia de influencer marketing: coherencia y credibilidad. “El millenial y el Z ya no està dispuesto a que lo engañes”, dice Daniel Pérez, brand communication director de Desigual.
El influencer marketing es “una relación de conveniencia: marcas e influencers se necesitan unos a otros”, define Luc Lorén, miembro de The Tripletz.
Desde el punto de vista de la marca o agencia se debe apostar por un modelo sostenible que seleccione influencers alineados con los valores de la marca. Los influencers son un buen canal como prescriptores y nos ayudan con el SEO, el tráfico y hacen crecer nuestra comunidad, pero no debemos ver el influencer marketing como la solución a nuestros problemas, sino que se debe integrar a nuestro ecosistema. Además, es muy importante “entender el mundo de los influencers desde la estrategia y no desde la táctica”, añade Daniel Pérez.
Los influencers son las nuevas celebrities
El marketing de influencers se debe tomar en serio. “Detrás de una foto hay mucho trabajo que me gustaría que se valorara: un análisis previo de la marca, del público, etc.”, dice Daniel Illescas. Ya que, en definitiva “los influencers son las nuevas celebrities”, como bien dice Santi Millán, a lo que añade que para ser influencer “lo importante es encontrar tu singularidad y potenciarla”.
Por ello, los influencers a veces son un poco recelosos de su comunidad: “Nuestro capital es la relación con nuestros seguidores y normalmente a ellos no les gusta que hagamos publicidad, no piensas tanto ‘qué voy a ganar’, si no ‘qué voy a perder’. Si pierdo mi capital ya no soy nada”, dice Roc Massaguer, conocido en las redes como Out Consumer.
Al ser un nuevo canal publicitario, todavía no hay una regulación clara, lo que lleva a situaciones duramente criticadas como la publicidad encubierta o la compra de seguidores. La falta de regulación supone una gran responsabilidad para los influencers, cuya profesión también está totalmente desamparada por la ley.
Las marcas tienen que usar a los influencers como canal para explicar historias que te interesan como persona, no como contenido publicitario
Para evitar situaciones de falta de credibilidad Roc Massaguer dice que “el truco no es que no se note que es publicidad, si no que al público le de igual que lo sea porque el contenido es bueno”. Por lo tanto la creatividad es también un aspecto que debe relucir en este tipo de campañas.
Desde un punto de vista optimista, Ona Carbonell ve las redes sociales como “una gran oportunidad para transmitir muchos valores. Las marcas tienen que usar a los influencers como canal para explicar historias que te interesan como persona, no como contenido publicitario”. Y aunque alaba las ventajas de estas nuevas tecnologías, también recalca la importancia de vivir nuestra vida fuera de las pantallas.
Puedes ver la sesión completa aquí:
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